jueves, 12 de febrero de 2015

Porque de bici no vive sólo el hombre. Trail Running blanco


Después de haber intentado subir sin éxito hace un par de días hasta Belatxikieta con la bici, y resultandome imposible por la cantidad de nieve y hielo que había, me decidí a volver a intentarlo corriendo, otro de los deportes que me gusta practicar cada día más.

Así que tras una comida ligera y una pequeña digestión, me puse las zapatillas de Trail, un poco de abrigo y arranque hacia arriba. Con dos horas de luz por delante y mi estado de forma, sabia que no me iba a dar tiempo a volver de día, pero como siempre me acompañaba mi navaja suiza móvil de la que tanto se ríe la gente cuando la ven, que no es otra que mi teléfono móvil el Samsung Galaxy S II, que con más de 4 años, todavía es capaz de sacar fotos, grabar las rutas con el gps, acompañarte con un poco de música e iluminarte el camino con su potente luz led.

Opté por subir gran parte del camino por la pista en vez de por el duro sendero, ya que ni estoy en forma aún como para tirar por él, ni mis zapatillas sin GoreTex eran las más adecuadas para ir desde tan abajo con ellas mojadas. Así que subí por las rodadas que habían dejado los todo terrenos hasta la fuente de donde me había quedado días atrás con la bici.


Aquí deje atrás la pista y empece a subir  por el sendero de la cuesta del silencio, que si en seco hace honor a su nombre, haciendo callar asfixiados a todos, con nieve y hielo se hacia todavía más divertido.

Dejando atrás el bosque blanco, continuo por el escarpado sendero ya sin ningún tipo de vegetación a la vista y el paisaje se vuelve increíble, todo absolutamente blanco y el sol poniéndose a mi derecha con unos colores que hacían que me olvidará por unos momentos de lo duro que estaba el camino.


Y así llego hasta las bordas y ermita de Belatxikieta donde hago una pequeña parada junto a ella recobrando fuerzas para hacer el último tramo hasta la cumbre, llegando allí cuando se esta ocultando el sol por el horizonte tras las montañas en un espectáculo grandioso.

Tras unos minutos disfrutando del espectáculo y recobrando el aliento, inicio la vuelta sin demora, ya que quedaban pocos minutos de luz y quería llegar hasta la pista antes de que se hiciese completamente de noche, ya que desde allí no hay mucho problema para bajar ya sin apenas luz.


Haciendo ya los últimos kilómetros completamente de noche, la pierna que he tenido lesionada me vuelve a dar guerra y acabo teniendo que hacer presión para evitar los pinchazos. Así llego hasta casa, jodido pero contento por haber disfrutado de lo lindo, ya veremos cuando volveré a correr...


1 comentario :

  1. Practicar trail en la montaña exige calzado adecuado. La elección cuidadosa proporciona tracción, soporte y protección. Un compañero fiable que asegura una experiencia de trail sin preocupaciones y llena de desafíos.

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